- Interpone la denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción contra del Fiscal Martín Castillo Salas y su auxiliar, porque la unidad fue entregada a otra persona.
Irineo Pérez Melo.- La ciudadana Claudia Contreras Hernández denunció al fiscal Martín Castillo Salas y a su auxiliar Guillermo Romero Rodríguez ante la Fiscalía Anticorrupción por los presuntos delitos de confabulación y abuso de autoridad, y los que le resulten, por vender un vehículo Jetta 2016 de su propiedad, sin contar con la documentación original de la unidad.
En conferencia de prensa, la agraviada dijo que el automóvil lo adquirió en 2020, mismo que fue levantado y llevado a los corralones de la empresa de Grúas Gatsa, de donde fue sacado por la señora Rosa Carmina Ferto Ortiz, para venderlo en 62 mil pesos, por lo que interpuso la denuncia ante la fiscalía correspondiente.
“Yo los denuncie a los dos para ver quien me responderá por mi carro, porque ahora se echan la bolita entre ellos y ahora nadie me recibe”, agregó, para luego mencionar que fue Felipe Baizabal Lagunes quien le tomó la denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción, quien le confirmó que se abocará a investigar sobre la corrupción del fiscal mencionado, pero que la entrega del carro es en otra instancia.
Sin embargo, ahora Baizabal Lagunes me sale con que “mi factura es una copia de no sé de qué, porque yo traigo mi original. Ahora no quiero esperarme, porque al rato la culpable seré yo”, añadió.
Insistió en que toda la documentación del vehículo está en regla, pero nadie le da respuesta y la unidad no aparece. De lo último que supo es que el carro estaba en los corralones de Gatsa, “de ahí la señora Rosa Carmina lo sacó; a ella se lo dieron con una copia de mi original, tengo entendido que no se puede hacer eso, pero ellos así lo hicieron, pero yo tengo todos los papeles bien, lo dicen los peritos y lo dice la carpeta de investigación”, añadió.
Ante estos hechos, pidió la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, en donde personal del organismo establecieron el compromiso de investigar, pero su caso no avanza y “ya estoy cansada de dar vueltas y de gastar en abogados sin conseguir solución al problema”, concluyó.