- Además, se garantiza seguridad tanto para el usuario como al trabajador del volante: Cecilia Peña.
Irineo Pérez Melo.- Los operativos implementados por la Dirección General de Transporte Público del Estado de Veracruz son benéficos para todo el gremio transportistas, de manera especial para los taxistas, ya que de esta manera se tiene la certeza de quienes están laborando son auténticos trabajadores del volante.
Esto lo aseguró Cecilia Peña Hernández, secretaria general de la Sección 19 de la Unión Vicente Guerrero de Taxistas, Concesionarios del Transporte Público, Similares y Conexos del Estado de Veracruz-FATEV-CAT, quien dijo que de esta manera se garantiza que aquellos que prestan el servicio de transporte en su modalidad de taxi, están debidamente empadronados.
En entrevista, comentó que en el caso de los agremiados de la organización que representa, quienes brindan servicio en las ciudades de Xalapa, Coatepec, Xico, Teocelo y Cosautlán de Carvajal, se sienten seguros con la aplicación de dichos operativos en la zona, porque las autoridades del ramo han atendidos estos reclamos, cumpliendo con las instrucciones dadas por el gobernador Cuitláhuac García Jiménez.
De esta manera, indicó, se constata que los taxis que transitan por la zona estén debidamente empadronados, porque se han dado situaciones que lamentar por el “pirataje” existente, en donde los usuarios se ven inmersos de las acciones delictivas de estos malos “transportistas”.
“Estamos a favor de esos operativos, porque eso nos garantiza cuántos somos realmente y la autoridad verifica el cumplimiento de las leyes vigentes, constatando que toda su documentación esté en regla para ofrecer el servicio público de transporte pasajeros”, apuntó.
Mencionó que quienes se han opuesto a estas medidas, es gente que está al margen de la ley, que no cuenta con la documentación para brindar este servicio y por ello se inconforma y se niega a participar en estas acciones.
Por otro lado, pidió el respaldo de las autoridades gubernamentales para que analicen la posibilidad de ajustar las tarifas que actualmente se tienen, dado que las que rigen se han vuelto obsoletas ante el constante aumento a los combustibles y los productos de primera necesidad.