*No solamente Trumpo…también López Obrador que continua con ella con las conferencias mañaneras
*El riesgo lo enfrentó exitosamente: su campaña y la dignidad del mexicano en los EEUU
*Fue otro Presidente con la seguridad y el temple de un mexicano ante el poderoso del mundo
“La pasión es el inicio del éxito”
Alfonso Mora Chama
Tampoco fue algo extraordinario, no. Fue una reunión diplomática, cierto. Como tantas que lleva a cabo el presidente Trompas con personajes políticos y Reyes, embajadores y todo lo que se envuelve en el derecho internacional. Ayer lo comentamos en nuestro programa digital, que fue un acierto la postura de López Obrador ante las mentiras del presidente republicano de 74 años de edad y con casi dos metros de estatura.
Digamos…fue una reunión disciplinada. Porque nuestro presidente seguramente no creyó eso de que ahora los mexicanos somos los más chingones del planeta, gentiles, útiles y negociantes. Todo lo contrario a las declaraciones que un día antes del encuentro con AMLO manifestara precisamente en donde se construye el muro fronterizo, mismo que a los mexicanos les valdrá madre para traspasarlo, con las mañas y la astucia que nos caracteriza, sobre todo cuando se trata por las malas…
Seamos sinceros amigos todos, morenistas sobre todo. Superó la prueba ciertamente, no cabe la menor duda, vimos y escuchamos a otro presidente de México diferente a las mañaneras, sin esa lentitud desesperante para hablar y para responder, desorientado con sus datos a lo que se le cuestiona. No. En la Casa Blanca, ante el presidente gringo, el número 45 en la historia del país vecino del norte, estuve ligero, seguro y sonriente. Claro. Si fue el mismo Marcelo Luis Ebrard Casaubón, Secretario de Relaciones Exteriores y ex jefe de gobierno de la ciudad de México en el período 2006-2012, quien tuvo a cargo la batuta de la sinfónica integrada por AMLO, 12 empresarios mexicanos y el mismo numero de medios de comunicación, quien previo análisis y con la experiencia adquirida en estos dos años de colaborador de López Obrador, redactó el documento que se tendría que leer en esta reunión en la Casa Blanca…a sus 60 años, Marcelo Ebrard se pinta con suficientes espolones para disputar la ansiada silla presidencial que dejara bien calientita don Porfirio Díaz Mori…
Curiosamente los dos mandatarios, Trump y López Obrador, olvidaron los agravios, sostuvieron las mentiras y aceptaron el Tratado de Libre Comercio, eso sí, de los neoliberales, a los que tanto odia y menciona en las conferencias mañaneras. Y si vemos y tomamos esta entrevista son signos positivos, fueron más para Andrés López Obrador que para Donald Trump, hablando de las campañas políticas, más cercana la de Donald., el martes 3 de noviembre de este año, con los 538 miembros del Colegio Electoral, buscando los 270 votos suficientes para ganar, llevando en la fórmula como Vicepresidente a Mike Pence, votaciones que servirán a la vez para elegir a 34 senadores y la totalidad de la Cámara de Representantes…
Y aseguramos que el ganón fue Andrés Manuel porque su imagen continuará apareciendo como aprobado ante este examen, el primero en su carácter de Presidente de México, con la misma táctica iniciada desde el primer día que apareció con la banda presidencial y que, por desgracia, volverá a lo mismo, con esa rutina que desubica a los mexicanos en donde solamente él y su chicharrón truena. Nadie más.
Concluimos…fue una exitosa gira pero no en las exageraciones como la prensa azteca lo describe, tomando en cuenta que Trump intenta una vez más de agarrarnos de pendejos, cumplida ya la reunión con AMLO y buscando la reelección que aseguran…la tiene en la bolsa. Que Dios nos agarre confesados. No les extrañe si Trump nos llame otra vez maleantes, sucios, dorgadictos, etece, etece…es malvado, es perverso y lo que manifestó en la Casa Blanca ante Andrés Manuel, ni su madre se lo cree.
Si recuerdo que en una de las visitas de Ronald Wilson Reagan, el republicano y cuadragésimo presidente de EEUU, a México, el presidente de México Miguel de la Madrid, en ese año de 1985, después de ciertas rencillas entre ambos países, al despedirse en el aeropuerto de la ciudad de México, dijo en tono irónico y amenazante:
Dios los bendiga.