*Pozos al pozo
Como dicen en la Cuenca del Papaloapan, en su comparecencia para la Glosa del Informe de Gobierno ante los diputados del Congreso veracruzano, el Secretario de Gobierno, originario de Otatitlán Eric Cisneros Burgos, robaleó y no cayó en las tentaciones de llevar sus respuestas a terrenos escabrosos de los que no podría salir bien librado, se mantuvo durante seis horas con la premisa de que Veracruz está mejor antes.
En dos rondas de preguntas de los diputados locales, que sucedieron a la presentación de un informe de 30 minutos en los que consignó el avance en materia de gobierno en los últimos 11 meses, el titular de la política interna contestó con cifras la mayoría de los cuestionamientos y en los casos en los que olía peligro, esquivó, evadió y parló para no meterse en problemas.
A diferencia de los que se esperaba, mostró madurez y responsabilidad púbica, soportó los embates de los legisladores del PAN y hasta del locuaz diputado de MORENA, Magdaleno Rosales Torres que más que de casa pareció del equipo contrario aunque con preguntas repetidas que ningún daño hicieron.
Cisneros Burgos destacó las garantías de la libertad de expresión, Registro Civil, combate a la corrupción, castigo a los servidores públicos acosadores, avance en combate a la delincuencia en números aunque la percepción sea distinta, se deslindó bien de las acusaciones de amenazas emitidas por él o sus colaboradores y hasta logró desquiciar a la aguerrida diputada del PAN, María Josefina Gamboa Torales quien no logró llevarlo a la zona de los lavaderos.
La diputada también del PAN, Monserrat Ortega Ruiz, también intentó evidenciarlo con el tema de una convocatoria, con educación, elegancia y mucho respeto, pero tampoco tuvo éxito, las respuestas del funcionario fueron sustentadas, o al menos las planteó con una seguridad muy creíble.
La comparecencia de seis horas, se convirtió por momentos en circo, pero no pasó a mayores, en términos generales, el Secretario de Gobierno demostró porqué está en ese lugar, con colmillo libró los golpes que por demás evidenciaron poca capacidad de los legisladores para sustentar cuestionamientos.
En fin, la primera comparecencia se define en diputados no preparados, que se basaron en chismes o señalamientos sin pruebas -si las hay, no las presentaron- y por lo tanto, el compareciente, simplemente se los comió.
Pozos al pozo
El diputado local Juan Manuel Pozos Castro que se había convertido un dolor de cabeza para el Presidente de la Junta de Coordinación Política en el Congreso Local de Veracruz, fue regresado a su curul como diputado común y corriente, como sebo para que cediera le ofrecieron la Secretaría de Desarrollo Social en el estado, y él se atrevió a pedir la Super Delegación Federal que tiene a su cargo, Manuel Huerta Ladrón de Guevara.
Sin embargo, los días pasan y no le cumplen, ni le cumplirán, tampoco se hará efectiva la candidatura de su hijo al gobierno municipal de Tuxpan para su hijo, José Manuel Pozos del Angel, al que metió a trabajar en la Secretaría de Finanzas y Planeación del gobierno estatal.
El problema de Pozos es su mala relación con el encargado de la política interna de Veracruz, sus propios cercanos aseguran que cuando se encuentran del frente el diputado el Secretario de Gobierno se evitan, para no chocar miradas y mucho menos saludarse así, se encuentren enfrente del jefe máximo.
Y es que Pozos Castro no es de MORENA, y aunque fue postulado por el PES, sus antecedentes partidistas corresponden al PRI, así que se encuentra entrampado en su pasado y su presente.
Así que el legislador norteño tuvo ya su momento de gloria al presidir por un año, la Mesa Directiva del Honorable Congreso del Estado de Veracruz de Ignacio de la Llave, es decir, está servido.