*Con ello se darán los primeros pasos en la construcción de un proyecto integral para México y Veracruz, indica.
Irineo Pérez Melo.- Solo se podrá conseguir la justicia y la paz si todos nos ocupamos por buscar el bien moral y la verdad. Solo haciendo el bien y evitando el mal es como lograremos iniciar un ambiente seguro para todos.
Esto lo aseguró la Arquidiócesis de Xalapa en el comunicado dominical emitido por la Oficina de Comunicación Social, en donde refiere que el bien común no consiste en la simple suma de los bienes particulares de cada sujeto del cuerpo social.
“Siendo de todos y de cada uno es y permanece común, porque es indivisible y porque sólo juntos es posible alcanzarlo, acrecentarlo y custodiarlo, también en vistas al futuro”, se añade en el documento signado por el presbítero Juan Beristain de los Santos.
Además, se refiere a la importancia de caminar en la verdad y buscar hacer el bien para dar los primeros pasos en la construcción de proyecto de desarrollo integral en nuestra patria y nuestro estado, en donde se deben considerarse la dignidad, unidad e igualdad de todos para inspirar y fomentar cualquier tipo de proyecto.
“Muchas veces en la elaboración de proyectos se excluye a los demás y se toman más en cuenta factores técnicos que dichos rasgos esenciales de la persona. Si la persona no está al centro como factor esencial de todos los proyectos sociales venideros, estaremos destinados a padecer e incrementar los problemas de inseguridad, pobreza, violencia, desigualdad, escases de agua que no se han podido resolver del todo”, se añade en el documento.
Será un gran acierto de los candidatos ganadores de estas elecciones reconocer, promover e incluir en todo proyecto la dignidad de la persona, pues ésta solo puede respetarse con acciones concretas y medibles en beneficios para todos, se destaca.
Estos tres componentes constitutivos de la persona deben ser reconocidos tanto en todo ciudadano como en toda autoridad política. No es conveniente desprestigiar a nadie sin pruebas. Solo la confianza de unos para con otros nos hará superar cualquier tipo de peligro que atente contra la vocación común a la perfección y al estado de derecho.
El principio básico del bien común será el puente firme para todos dejemos atrás el mar de intereses personales y arribemos a un ambiente de lo más importantes sea la persona y la realización verdadera de todos sin excepción de nadie, se indica por último.