*Goliat el que vive peregrinando de la tribu de israelitas, reta al pequeño
pastor David de la tribu Judá en la versión 2021…
“Una nación de ovejas engendra un gobierno de lobos”
Alfonso Mora Chama
El pequeño pastor de los Chedraui y de los Fernández, David, estaba aparentemente tranquilo. Su encuentro con Judá, cuarto hijo de Jacob, importante líder de las doce tribus de Israel… perdón, con Jesús Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, presidente del comité estatal del PAN, le había rendido frutos logrando la precandidatura de la alianza PAN, PRI y PRD para la conquista de la presidencia municipal del maltratado municipio de Xalapa… ignoraba que, como lo reseña bíblicamente Samuel 17; 1-11, 16, el pequeño pastor, David, le esperaría la peor batalla de su vida, de su familia y de su nueva militancia panista y perredista.
Se anuncia, para algunos, señal de desesperación morenista y carencia de cuadros y liderazgo; para otros, analistas de la política a la veracruzana, como la solución inmediata a la perpetuidad del poder de Morena en la capital de Veracruz, de lo contrario, una derrota estaría marcando el futuro del partido en el poder federal, estatal y del Congreso Local y nos referimos a la no tan sorpresiva precandidatura de Ricardo Ahued Bardahuil, apenas en su registro, para la alcaldía xalapeña, lugar que ocupó durante la administración 2005-2007, como también diputado federal y local por las siglas del PRI y como senador apoyado por Morena.
Existe gozo en la clase política de Morena Veracruz, por dos profundas razones: la sana, que ganaría con facilidad la silla municipal xalapeña y, la otra malsana, perversa y peligrosa, cumpliéndose el capricho de Norma Rocío Nahle García, de Río Grande, Zacatecas, que a sus 56 años desea y aspira a convertirse en gobernadora de Veracruz, para exponerlo a una derrota, además una como una tomada de pelo y escasa seriedad no solamente a su actual partido de Regeneración Nacional, a la misma ciudadanía de Xalapa, porque de lograr el triunfo como ya desde ahora se pregona, no estaría en funciones de alcalde, dejando su lugar al suplente o en dado caso, a la sindica, desde luego de las filas morenistas…
Ricardo Ahued lo sabe y lo asegura, diríamos que tiene mayor posibilidad de buscar la candidatura al gobierno de Veracruz que en el poder municipal de Xalapa. Citemos la historia de 1Samuel 17: 45, en donde se reseña que al poderoso e indispensable Goliat, lo convencieron los morenistas, perdón, los filisteos, para retar burlonamente al más valiente de Israel en el valle de Xalapa, perdón, de Ela, y Goliat paladín peligrosísimo que media seis codos y un palmo, casco de bronce en la cabeza, cota de malla con un peso de cinco mil siclos de bronce y en las fuertes piernas grebas de bronce y jabalina de bronce entre su hombros, asta de lanza como rodillo de telar y su escudero delante de él, dijo a su compañeros de guerra… “déjenme solo que yo solito le parte el queso a quien se atreva a retarme”, digo, se entiende que palabras más, palabras menos, coinciden; “dadme un hombre que pelee conmigo”, como pidiendo macho, y así durante veinte días de la campaña, perdón, cuarenta días asedió Goliat a los ejércitos de Israel…
Pero se le apareció el diablo en calzones, es decir, un pequeño e indefenso pastor de nombre David de la tribu del “Chapito”, perdón, de Judá, y con el espíritu de los Fernández y de los Chedraui, perdón, de los israelitas, hizo frente al reto y este jovencito pródigo en talento y buen semblante, se colocó frente al que vive peregrinando, así el significado de Ricardo, perdón de Goliat quien iba precedido por su escudero y así dijo el pastorcito: “ tú vienes a mi con una espada y una lanza y con una jabalina, pero yo voy a ti con el nombre del “Chapito”, perdón, de Yahveth de los panistas, perdón, de los ejércitos, el Dios de las líneas de batalla de Israel, a quien tú has desafiado con escarnio”.
Y esto se puso más cabrón, cuando de repente el pequeño pastorcito, David, le lanzó una piedra con su honda y llevaba tanta fuerza que se le hundió en la frente…. Y Ricardo, perdón, Goliat, cayó a tierra de este bíblico madrazo. Pero no terminó el desmadre porque ya encabronado David y ante el júbilo de las multitudes panistas, perdón, israelitas encabezadas por Judá, nuevamente perdón, por don Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, lo decapitó, sí a Goliat, con su propia espada.
El débil, aparentemente, sacó la casta y fue así como David tomó la pelona del filisteo y la llevó a Xalapa, perdón, a Jerusalén y como prueba de valor y hazaña puso las armas de Ricardo, perdón de Goliat, en su tienda de Xalapa, otros aseguran que por Consolapan en una fábrica de bolsas…
Lo que sí se comenta que David dejó la espada de Goliat en el santuario del Chapito, perdón, en Judá, en manos de un sacerdote…
¿ Qué cosas verdad… ?