Ruby… ¡ Ni pervertida ni insaciable…!

*Sólo es un negocio dentro de una disociación que debemos soportar…

*Servidumbre humana para algunos…cálidos y generosos los ancianos.

*Nos piden caricias y frotraciones, boca y manos, el llamado onanismo según nos comentan…

““Pero a una prostituta llámala siempre señora. La vida de las prostitutas es muy dura, y no cuesta nada ser respetuoso con ellas.”.

Patrick Rothfuss 


Alfonso Mora Chama

Sentada en un taburete de cinco patas, la preciosa y atractiva Ruby nos recibe con el contagio de una chava quinceañera, mientras le damos en su mano derecha el ramo de rosas blancas y el chocolate  Hershy´s que nos solicitó a cambio de una segunda charla y un café de olla, directo del brasero a la mesita de madera elaborada allá en lo alto de la montaña…por El Triunfo, asegura. Su modesto y coqueto vestido la hace destilar sexualidad, lo sabe, sonríe enseñando sus blancos dientes.

-Sabes Alfonso…me agradan los halagos. Las personas no deben perder los modales y principios de cortesía. Los hombres más caballeros que morbosos, el mundo sería diferente. Debo decirte que siempre será un gusto platicar contigo, me tratas como a una dama, como a mis amigas también…pero en cambio existen hombres que nos destrozan física, moral y emocionalmente.

-Se levanta la diva Ruby – le encantan los calificativos de Diosa y divina mujer – para servirnos el café e inmediatamente continuar con la charla…

-Me dijiste Alfonso que me consideran pervertida o también insaciable, ninguno de los dos conceptos…la carga negativa es muy fuerte en este oficio nuestro, es decir, seamos realistas Alfonso, es un trabajo difícil de una puta a quien solamente se le critica y se le juzga pero no se analiza que una de las cualidades imprescindible para ejercerlo es a base de la disociación, quiero explicarte…llevar al extremo la capacidad de actuación, tenemos que aguantar a mugrosos, malos olores, fealdades que hemos tenido que vomitar…y nos dicen que es una labor de sexoservidora fácil y cómodo.

-Quiero ver que quienes nos critican, incluso curas y damas de la sociedad, se atrevan a acostarse con un cliente sin bañarse y que por unos 200 pesos tengan que besarlo, apapacharlo y no manches…aguantarlo hasta que se desahoga por eso siempre he sostenido que los hombres son pendejos cuando consideran que la figura de una prostituta es solo vender caricias y cuerpo. Somos tan mujeres como las que visten lujosos y costosos vestidos. Como las que suelen despreciarnos si son ellas que dentro de la hipocresía son más putas que nosotros que lo hacemos por necesidad…ellas por putería.

-No pueden emitir un juicio si no conocen el fondo de la olla, – agrega la linda Ruby –la sociedad es cruel con nuestro trabajo, una actividad ilegal quizás pero tolerada por las autoridades en donde por mi parte me gusta jugar con los hombres…con mis clientes en donde llegan de todo, joviales, amargados, generosos y limpios…otros respetuosos y tenorios; tenemos el rechazo de la sociedad y los clientes lo saben y nos buscan…¿luego entonces?

-Acaso solamente nosotros somos culpables? Somos como me dijo una dama de la sociedad de Coatepec, de tantas que pasan y nos insultan…”son demonios sexuales”, una especie de “mujeres diabólicas”…nada, nada. Somos quienes hacemos felices a sus maridos, deberían darnos las gracias cuando ellas, al decir de sus esposos, solo son calamidades, achaques y rezos en las iglesias…

-Ruby…estás muy jovencita. Dos niñas y tu marido. Vives más o menos, en esta comunidad se te estima, me enteré al llegar en el colectivo…habla bien de ti, muy sociable y humana con la gente…a pesar de que saben que trabajas en este oficio…

-Si es una verdad. La gente de aquí desde que llegué de mi comunidad allá por El Triunfo, me han tratado bien, a mis hijas las quieren y las respetan, es gente que vale, que tiene valores y no se espanta del ruido o del silencio de una puta, de este negocio de la necesidad, de la oscuridad de la noche, del burdel en penumbra, oficio de puta del ocultamiento familiar…del secreto.

-No es correcto Ruby, pero tu edad, se puede saber?

-Ya te dije cuántos años tengo. En la charla de hace un año en el parque de Coatepec, tenía 27 años, ahora uno más…y el entusiasmo es el mismo, confiando en Dios, en su perdón y en la salvación.

-¿Clientes?…de todo Ruby?

-Los viejitos conmigo…muy tiernos y respetuosos, cálidos y no falta quien termine mi trabajo con él y me proponga matrimonio, son jubilados que en las mañanas salen a caminar, estar con prostitutas, habituales en las horas muertas de la mañana, limpios, aseados, en un horario de nueve de la mañana a dos de la tarde…y jalan para sus hogares.

-Los tengo como amigos…le regalan chocolates y churros para mis hijas, el gordito risueño con su escaso pene como un cacahuate, flacos, altos, bajitos, tiernos aunque hay uno muy brutal, en su trato…y tacaño, un hijo de la mala vida…éste solo quiere que lo haga enloquecer y no me cuesta porque no me penetra, gime cuando le provoco placer con frotaciones y caricias con las manos y me dice que esto se llama onanismo…pues se lo hago.

-Eso si…es muy católico, dice que seguirá pecando conmigo…le dije, tu bronca don Dios es aparte. Porque me comenta este anciano letrado que el onanismo es un acto sexual que está mal en eso de la moral, me dice que hasta de salud, pero que nada le hace, si se tiene que ir al infierno como que ya sabe que se irá a lo calientito…pero se irá él, yo ni madre Alfonso, yo sigo aquí con mi oficio tan natural en mí y tan difícil rompiendo tabúes en mi mente como mujer que ofrece sus servicios sexuales…amor nada, solo placer y a ratos.

-Te sientes bien así Ruby?…para concluir.

-.Ni bien ni mal. Aprendí trucos para soportar a los clientes, porque mis genitales arden a veces, lubricantes, condones, cansancio, entendiendo que las putas existimos porque hay misóginos y a los hombres solo les interesa sus necesidades sexuales, hasta pagan por eso…algunos maleducados y amenazantes…aquí seguiremos trabajando en esto de la prostitución sabiendo que lograremos el perdón del Creador, de los clientes no se…ellos pedirán perdón aparte…suplicarán por infieles.

-Algo más Ruby…para despedirnos?

-Dentro de la sexualidad puede florecer la verdad…aplicando esta frase estimado amigo:

 “Una santa puede caer en el barro y una prostituta puede subir a la luz.”